El sector bancario de Hong Kong parece bastante resistente en este momento. Se dice que sus colchones de capital son lo suficientemente sólidos como para soportar la tormenta que se avecina en el sector inmobiliario comercial. ¿Preocupaciones sobre la calidad de los activos? Claro, son reales, pero estas instituciones han construido colchones lo suficientemente gruesos como para absorber los golpes sin sudar. La base parece sólida incluso cuando los mercados inmobiliarios siguen inestables.