Amazon está haciendo otro empuje serio en el juego de hardware de IA, y esta vez están apuntando directamente al territorio de Nvidia y Google. El gigante del comercio electrónico no solo está probando las aguas; están construyendo chips diseñados para competir cara a cara con los pesos pesados de la industria.
¿Qué está impulsando este movimiento? Economía simple. Los proveedores de la nube están cansados de pagar los precios premium de Nvidia, y Amazon Web Services necesita silicio propietario para mantenerse competitivo. Los chips personalizados significan mejores márgenes, una integración más estrecha con su pila de nube y menos dependencia de proveedores externos.
El momento también es interesante. Mientras Nvidia sigue imprimiendo dinero gracias al auge de la IA, están apareciendo grietas. Los TPUs de Google han demostrado que el hardware personalizado funciona. Los competidores ven sangre en el agua.
Para el espacio de cripto y Web3, esto importa más de lo que piensas. Las redes de computación descentralizada, los protocolos impulsados por IA y el aprendizaje automático en cadena necesitan poder de procesamiento asequible y accesible. Cuando los gigantes tecnológicos libran guerras de chips, la innovación se acelera y los precios eventualmente bajan.
Amazon no está tratando de reemplazar a Nvidia de la noche a la mañana—eso es fantasía. Pero conseguir un 10-20% de participación en el mercado? Totalmente realista. Y eso es suficiente para remodelar todo el paisaje de la infraestructura de IA.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Amazon está haciendo otro empuje serio en el juego de hardware de IA, y esta vez están apuntando directamente al territorio de Nvidia y Google. El gigante del comercio electrónico no solo está probando las aguas; están construyendo chips diseñados para competir cara a cara con los pesos pesados de la industria.
¿Qué está impulsando este movimiento? Economía simple. Los proveedores de la nube están cansados de pagar los precios premium de Nvidia, y Amazon Web Services necesita silicio propietario para mantenerse competitivo. Los chips personalizados significan mejores márgenes, una integración más estrecha con su pila de nube y menos dependencia de proveedores externos.
El momento también es interesante. Mientras Nvidia sigue imprimiendo dinero gracias al auge de la IA, están apareciendo grietas. Los TPUs de Google han demostrado que el hardware personalizado funciona. Los competidores ven sangre en el agua.
Para el espacio de cripto y Web3, esto importa más de lo que piensas. Las redes de computación descentralizada, los protocolos impulsados por IA y el aprendizaje automático en cadena necesitan poder de procesamiento asequible y accesible. Cuando los gigantes tecnológicos libran guerras de chips, la innovación se acelera y los precios eventualmente bajan.
Amazon no está tratando de reemplazar a Nvidia de la noche a la mañana—eso es fantasía. Pero conseguir un 10-20% de participación en el mercado? Totalmente realista. Y eso es suficiente para remodelar todo el paisaje de la infraestructura de IA.