CleanSpark acaba de hacer una jugada maestra: recaudó 1.150 millones de dólares en noviembre, y ahora sabemos por qué. Apostaron a que MSCI expulsaría a los mineros de bitcoin de sus índices el 15 de enero. Así está la cosa: cualquier minero que tenga más del 50% de sus activos en criptomonedas queda fuera, lo que significa que 11.600 millones de dólares en fondos de seguimiento pasivo no tienen más remedio que deshacerse de las acciones de CLSK, Riot y MARA.

CleanSpark claramente vio venir este tren. Justo después de que se conociera la noticia, anunciaron una recompra de acciones por $400 millones. Es el típico movimiento adelantándose a la ola de ventas forzadas. Mientras que los fondos pasivos están obligados por contrato a vender, CleanSpark está listo para recomprar sus propias acciones a lo que probablemente consideran precios de saldo. Es como ver a alguien montar un puesto de paraguas justo antes de la tormenta que predijo.