Lo más doloroso de hacer trading no es perder dinero, sino estar siempre ocupado sin rumbo y caer en el mismo error, sin poder avanzar nunca.
Primer paso: probar suerte a ciegas Ves una dirección en algún gran influencer/bloguero/KOL, entras con todo, apalancamiento alto, apuestas a lo grande, si ganas un poco sales corriendo, si pierdes aguantas, si la pérdida es grande rezas para recuperar, y cuando recuperas sales de inmediato. Si te liquidan, empiezas a dudar de ti mismo, luego insultas al influencer diciendo que está confabulado con el proyecto/la plataforma para engañar a los novatos. Eso no es trading, eso es jugar a la suerte. No es el mercado quien te quita el dinero, eres tú quien te entregas voluntariamente.
Segundo paso: fe ciega en la técnica/indicadores Cuando ves que la suerte no funciona, empiezas a aprender análisis técnico: medias móviles, ondas, teoría de ciclos, patrones, divergencias… Hablas en jerga técnica y pareces que sabes, pero cuanto más estudias, más pierdes. El problema no está en los indicadores, el problema es que quieres atajos, quieres que una herramienta piense por ti y tomas la herramienta como la respuesta a todo.
Tercer paso: entender las reglas Empiezas a comprender que las reglas son más importantes que la técnica. Cuanto más sencillo el sistema, más fácil sobrevivir. Dejas de perseguir lógicas técnicas complicadas y te centras en la lógica más simple: si rompe, entras; si cae, sales; si te equivocas, asumes la pérdida; si aciertas, mantienes la posición. Pero no creas que con esto ya lo tienes hecho. El gran problema sigue siendo la ejecución: tienes reglas pero no valor, sube y no te atreves a entrar, baja y no te atreves a vender en corto. Haces planes pero no los cumples; lo tienes todo pensado, pero cuando llega el momento, no te atreves a actuar.
Cuarto paso: comprender la probabilidad Aquí empiezas a parecerte a un trader profesional. La disciplina se vuelve instintiva: cierras cuando toca, sales cuando toca. Por fin entiendes la verdad del trading: no se trata de ganar o perder una sola operación; una pérdida no es un castigo, sino el precio de probar. Ya no te exiges ganar en cada operación, lo importante es la estrategia a largo plazo y el interés compuesto. A largo plazo, puedes ganar mucho más.
Quinto paso: comprender la naturaleza humana Quien realmente ha alcanzado la iluminación sabe que el mercado no son indicadores, ni técnicas, ni gráficos, sino la naturaleza humana. Lees el precio como lees emociones humanas, la tendencia como la avaricia de las personas, la volatilidad como sus luchas internas. Ante el mercado, no te emocionas, no te apresuras, no eres codicioso ni entras en pánico. Entrar es como respirar, salir como parpadear. Ya no hay emociones, solo naturaleza humana y probabilidad fundiéndose en uno solo.
En realidad, el mercado no es difícil; lo difícil es enfrentarse a tu propia pereza, avaricia, miedo, duda… ¿En qué paso estás ahora? 🙌🙌🙌
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Lo más doloroso de hacer trading no es perder dinero, sino estar siempre ocupado sin rumbo y caer en el mismo error, sin poder avanzar nunca.
Primer paso: probar suerte a ciegas
Ves una dirección en algún gran influencer/bloguero/KOL, entras con todo, apalancamiento alto, apuestas a lo grande, si ganas un poco sales corriendo, si pierdes aguantas, si la pérdida es grande rezas para recuperar, y cuando recuperas sales de inmediato. Si te liquidan, empiezas a dudar de ti mismo, luego insultas al influencer diciendo que está confabulado con el proyecto/la plataforma para engañar a los novatos. Eso no es trading, eso es jugar a la suerte. No es el mercado quien te quita el dinero, eres tú quien te entregas voluntariamente.
Segundo paso: fe ciega en la técnica/indicadores
Cuando ves que la suerte no funciona, empiezas a aprender análisis técnico: medias móviles, ondas, teoría de ciclos, patrones, divergencias… Hablas en jerga técnica y pareces que sabes, pero cuanto más estudias, más pierdes. El problema no está en los indicadores, el problema es que quieres atajos, quieres que una herramienta piense por ti y tomas la herramienta como la respuesta a todo.
Tercer paso: entender las reglas
Empiezas a comprender que las reglas son más importantes que la técnica. Cuanto más sencillo el sistema, más fácil sobrevivir. Dejas de perseguir lógicas técnicas complicadas y te centras en la lógica más simple: si rompe, entras; si cae, sales; si te equivocas, asumes la pérdida; si aciertas, mantienes la posición. Pero no creas que con esto ya lo tienes hecho. El gran problema sigue siendo la ejecución: tienes reglas pero no valor, sube y no te atreves a entrar, baja y no te atreves a vender en corto. Haces planes pero no los cumples; lo tienes todo pensado, pero cuando llega el momento, no te atreves a actuar.
Cuarto paso: comprender la probabilidad
Aquí empiezas a parecerte a un trader profesional. La disciplina se vuelve instintiva: cierras cuando toca, sales cuando toca. Por fin entiendes la verdad del trading: no se trata de ganar o perder una sola operación; una pérdida no es un castigo, sino el precio de probar. Ya no te exiges ganar en cada operación, lo importante es la estrategia a largo plazo y el interés compuesto. A largo plazo, puedes ganar mucho más.
Quinto paso: comprender la naturaleza humana
Quien realmente ha alcanzado la iluminación sabe que el mercado no son indicadores, ni técnicas, ni gráficos, sino la naturaleza humana. Lees el precio como lees emociones humanas, la tendencia como la avaricia de las personas, la volatilidad como sus luchas internas. Ante el mercado, no te emocionas, no te apresuras, no eres codicioso ni entras en pánico. Entrar es como respirar, salir como parpadear. Ya no hay emociones, solo naturaleza humana y probabilidad fundiéndose en uno solo.
En realidad, el mercado no es difícil; lo difícil es enfrentarse a tu propia pereza, avaricia, miedo, duda…
¿En qué paso estás ahora? 🙌🙌🙌