Las últimas semanas, el mercado de Bitcoin ha experimentado un cambio evidente: una significativa reducción en la presión de venta. Según el análisis de plataformas de datos en cadena, este fenómeno refleja un cambio profundo en el comportamiento de los participantes del mercado, quizás preparando el terreno para el próximo movimiento de precios.

Veamos primero los datos más directos. La cantidad de Bitcoin depositada por grandes operadores en exchanges ha caído drásticamente, pasando de aproximadamente 88,000 monedas diarias a mediados de noviembre a alrededor de 21,000 en la actualidad. ¿Qué significa esta caída? Que la oferta de Bitcoin que puede ser vendida en cualquier momento en el mercado está disminuyendo. En paralelo, BTC se recuperó desde un mínimo de 80,000 dólares hasta cerca de 94,000 dólares, coincidiendo exactamente con este período.

Lo que merece mayor atención es la tendencia de las ballenas. La proporción de depósitos de estos grandes inversores ha caído más del 50% desde su pico, y el tamaño de sus depósitos individuales también se ha reducido. Esto no es una coincidencia, sino una señal de que la estructura de oferta del mercado ha cambiado sustancialmente. Los inversores en general están tomando una decisión: mantener en lugar de vender.

¿A qué se debe este cambio? El análisis indica que el mercado ha pasado por una limpieza. Hace aproximadamente un mes, las ballenas sufrieron su mayor pérdida diaria desde julio, con una pérdida de 6.46 mil millones de dólares, acumulando más de 32 mil millones en pérdidas desde entonces; los inversores a corto plazo han estado vendiendo con pérdidas durante cuatro semanas consecutivas. Cuando la mayoría ya ha salido con pérdidas y el miedo se ha liberado completamente, lo que queda suele ser los que mantienen. La historia muestra que la agotación del pánico suele ser una señal importante para que el mercado forme un fondo.

El panorama macroeconómico también apoya esta tendencia. La Reserva Federal acaba de anunciar una reducción de tasas de 25 puntos básicos, lo que envía una señal clara de flexibilización monetaria. Para activos de riesgo como Bitcoin, un aumento en la liquidez esperado generalmente puede traducirse en una mejora significativa en el sentimiento del mercado.

En conjunto, los datos en cadena indican que la fase de pánico en el mercado ha pasado, y los inversores están pasando de simplemente digerir pérdidas a esperar y reestructurar sus posiciones. Si la presión de venta se mantiene en niveles bajos, y con la estimulación de la reducción de tasas, la probabilidad de que Bitcoin confirme un fondo está en aumento. El mercado podría estar en proceso de pasar de una fase de «venta por desesperación» a una de recuperación impulsada por «nuevos fondos y mantenedores».