La arquitectura Giga de Sei está cada vez más orientada hacia la consecución de un consenso robusto y finalización—y esto se alinea perfectamente con lo que la red está construyendo para la infraestructura del mercado global. El ecosistema de validadores se está volviendo más sofisticado, con jugadores importantes como intercambios líderes y proveedores de custodia interviniendo para soporte la red. La seguridad y la custodia de activos son pilares críticos en esta expansión. Se trata de crear la infraestructura que permite que el capital institucional fluya sin problemas hacia sistemas descentralizados.