Los primeros días de Jensen Huang en Nvidia fueron pura supervivencia. Cuando la empresa apenas sobrevivía, cerraron un trato con Sega para fabricar chips para lo que se convertiría en la consola Dreamcast. Esa colaboración fue su salvavidas.
Pero aquí viene lo sorprendente: estropearon el desarrollo. Y de forma grave. Mientras otras empresas de Silicon Valley prosperaban, Nvidia iba la última en la carrera. La tecnología no estaba lista. Los plazos se incumplían. Jensen se enfrentaba al desastre.
Necesitaba un último pago de $5M por parte de Sega. ¿Sin él? Juego terminado. No solo para el proyecto Dreamcast, sino para toda la compañía. Ese dinero era la diferencia entre cerrar y sobrevivir para luchar un día más.
Es increíble pensar que el gigante de las GPU que conocemos hoy estuvo una vez a un solo pago fallido de la extinción. Aquellas primeras batallas de hardware marcaron todo lo que vino después, incluyendo los chips que ahora impulsan modelos de IA y equipos de minería en todo el planeta.
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DecentralizeMe
· hace1h
Joder, ¿un solo pago de 50 millones de dólares puede salvar a la empresa? Esto sí que es ir all in de verdad.
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LiquidatedDreams
· hace1h
Joder, ¿5M salvaron a toda NVIDIA? Esta historia es realmente increíble, me parece más emocionante que cualquier película de emprendimiento.
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GasFeeCryBaby
· hace1h
Joder, ¿Nvidia estuvo a punto de irse a pique solo por 5 millones de dólares de Sega? Este guion es tan surrealista que ni me lo creo, pero joder, es demasiado real...
Los primeros días de Jensen Huang en Nvidia fueron pura supervivencia. Cuando la empresa apenas sobrevivía, cerraron un trato con Sega para fabricar chips para lo que se convertiría en la consola Dreamcast. Esa colaboración fue su salvavidas.
Pero aquí viene lo sorprendente: estropearon el desarrollo. Y de forma grave. Mientras otras empresas de Silicon Valley prosperaban, Nvidia iba la última en la carrera. La tecnología no estaba lista. Los plazos se incumplían. Jensen se enfrentaba al desastre.
Necesitaba un último pago de $5M por parte de Sega. ¿Sin él? Juego terminado. No solo para el proyecto Dreamcast, sino para toda la compañía. Ese dinero era la diferencia entre cerrar y sobrevivir para luchar un día más.
Es increíble pensar que el gigante de las GPU que conocemos hoy estuvo una vez a un solo pago fallido de la extinción. Aquellas primeras batallas de hardware marcaron todo lo que vino después, incluyendo los chips que ahora impulsan modelos de IA y equipos de minería en todo el planeta.