Hola mis amigos criptográficos. Los ríos siempre fluyen río abajo, pero los salmones que quieren poner sus huevos nadan obstinadamente río arriba, contra la corriente. La razón que los lleva a la meta es la perseverancia y la determinación, la paciencia y la dedicación. No te importa por dónde fluye el agua. Saben a dónde ir. Y qué hacer. Cualquiera que carezca de una de estas características eventualmente se convertirá en presa de los osos.